Mantener montones de papeles apilados encima de la mesa de trabajo es una mala costumbre muy extendida, que en contra de lo que se creé, perjudica más de lo que ayuda.
Porque aunque la justificación que se le suele dar es la de que «son temas urgentes que no se quieren perder de vista», en realidad son un estorbo.
Y no sólo porque están ocupando espacio, sino porque llega un momento en que hay tantos, que es prácticamente imposible controlar lo que pasa.
Y a esto súmale que cada vez que los miras te sientes mal porque no estás solucionándolos, y te agobias pensando en cuánto trabajo tienes aún por delante.
O sea, que te vas a casa cada día con el pesar de no ser productivo y de que jamás vas a terminar con esa pila porque cada día crece más y más.
Además, la imagen que da de ti una mesa llena de papeles, aunque los tengas muy bien colocados, es la de que:
- Estás desorganizado
- Funcionas con mucho retraso
- Pierdes buena parte de tu tiempo en buscar entre los montones de papeles.
¿O tú qué piensas cuando entras en el despacho de alguien y ves su mesa llena de papeles?
Puede que el pensamiento sea consciente o inconsciente, pero te lleva a creer que estás en manos de alguien poco productivo.
Pero esto tiene una solución mucho más simple de lo que te crees, y deberías implementarla desde hoy mismo.
Porque está más que comprobado que quienes funcionan de esta manera pierden alrededor de un 20% de su tiempo en localizar los documentos que necesitan.
Y también está demostrado que trabajar sobre una mesa en la que no hay nada que no sean las herramientas y la documentación que justamente necesitas para la tarea que estés realizando, incrementa muchísimo la productividad.
Y si quieres vivir «más tranquilo» pues no tienes más remedio que arreglar este tema.
Así que, vacía tu mesa.
Pruébalo.
Quita de encima todos esos papeles y escóndelos donde no puedas verlos, y quédate sólo con el que vayas a trabajar.
La primera sensación será la de que estás perdido, pero se te pasará enseguida cuando compruebes la claridad mental y el enfoque que eres capaz de aplicar en eso que vayas a hacer.
Pruébalo, en serio.
Que la productividad te acompañe!
Rafael Valero
PD – Sólo hay un lugar apropiado para los papeles que no estés usando…el archivo. Que ahí no estorban y recuperarlos es mucho más sencillo.
PD2 – Si te da miedo «archivar» los temas que tengas pendientes, puedes mantenerlos apilados, pero en cualquier caso, que no estén a tu vista. Mételos en un armario o en una caja, pero fuera de la mesa.